La operativa en el aeropuerto de Bruselas-Zaventem continúa gravemente afectada este lunes tras el ciberataque sufrido el pasado viernes contra los sistemas de facturación y embarque gestionados por la compañía Collins Aerospace. El fallo ha obligado a cancelar decenas de vuelos y ha dejado a miles de pasajeros varados durante el fin de semana, sin que exista aún una fecha clara para el restablecimiento completo de los servicios.
Se mantienen las cancelaciones de vuelos en Bruselas por un ciberataque
Un ataque informático deja cientos de vuelos cancelados en el aeropuerto de Bruselas y miles de retrasos a nivel europeo: ¿cómo afecta al arranque de semana?.
Cientos de personas esperando en el aeropuerto de Bruselas.
Solo el domingo, la infraestructura belga registró 45 cancelaciones de salidas y 30 de llegadas. El sábado ya se habían suprimido 38 operaciones y, según las previsiones, este lunes la situación seguirá marcada por anulaciones y retrasos. La facturación manual y el refuerzo del personal han permitido mantener parte del tráfico, pero las escenas de colas interminables y viajeros a la espera de información se repitieron en las terminales.
Heathrow y Berlín, otros aeropuertos que han sufrido ciberataques simultáneos
El portavoz del aeropuerto, Ihsane Chioua Lekhli, reconoció que la recuperación “se aborda día a día” y que por el momento no puede garantizarse una normalización inmediata. Para contener el caos, las aerolíneas han recibido instrucciones de reducir a la mitad su operativa programada en Zaventem. (Huelga en Ryanair: estos son todos los vuelos afectados hasta final de año)
No es el único aeropuerto europeo afectado por la misma brecha tecnológica: tanto en Heathrow como en Berlín-Brandeburgo se registraron incidencias iniciales, pero la capacidad de adaptación del personal permitió recuperar la normalidad en pocas horas y evitar cancelaciones masivas.
Este tipo de ataques generan un "efecto dominó" entre aeropuertos
Las autoridades belgas han confirmado que el ataque solo impactó en los sistemas de facturación y equipaje, sin comprometer la seguridad aérea ni los controles de pasajeros. La Comisión Europea, sin embargo, ha advertido del riesgo que plantean este tipo de incidentes para las infraestructuras críticas de transporte, subrayando la necesidad de reforzar las inversiones en ciberseguridad.
Hasta ahora ningún grupo ha reivindicado la autoría del ataque, pero expertos en seguridad han alertado sobre el “efecto dominó” que puede producirse en la aviación global cuando un proveedor tecnológico común, como Collins Aerospace (recientemente vinculada a contratos de defensa de la OTAN), resulta vulnerado.
Temas relacionados