La cancelación de vuelos y la interrupción de servicios de tren han comenzado a afectar seriamente el sistema de transporte en Francia este martes, como consecuencia de una jornada de protestas protagonizada por controladores aéreos y trabajadores ferroviarios de SNCF (la operadora ferroviaria pública francesa).
Francia sufrirá dos huelgas esta semana que ponen en riesgo a su turismo
El aeropuerto de Toulouse y algunos servicios de trenes de SNCF sufrirán dos huelgas que amenazan con colapsar el sistema de Transportes de Francia.
Aeropuerto de Toulouse, en Francia.
Las movilizaciones coinciden con los días previos al puente festivo nacional del 8 de mayo (en conmemoración de la victoria de los Aliados en la Segunda Guerra Mundial en Europa), lo que incrementa el impacto en la movilidad de pasajeros a nivel nacional.
El aeropuerto de Toulouse, "a medio gas"
En el aeropuerto de Toulouse, un 30 % de los vuelos previstos han sido suspendidos tras el llamamiento a la huelga del personal de control aéreo. La Dirección General de Aviación Civil ha alertado sobre posibles incidencias a lo largo del día y ha aconsejado a los viajeros consultar directamente con las aerolíneas el estado de sus vuelos.
Este paro se suma a recientes protestas similares en otras terminales del país, como París-Charles de Gaulle, Orly y Marsella, que también han registrado retrasos y anulaciones, afectando incluso a la red aérea europea.
SNCF sufrirá cancelaciones de hasta el 66% de sus trenes regionales
El sector ferroviario también ha iniciado una serie de paros que ya han dejado consecuencias visibles, sobre todo en el norte del país. Dos tercios de los trenes regionales han sido cancelados, y los servicios de cercanías en París han experimentado fuertes alteraciones.
Las líneas RER y Transilien, especialmente la RER C y cuatro rutas de trenes suburbanos, funcionan con frecuencia reducida. No obstante, los trenes de alta velocidad (TGV) han mantenido hasta ahora su operativa habitual.
Los sindicatos de la empresa pública SNCF han convocado estos paros con la intención de presionar durante los días previos al festivo nacional del 8 de mayo, que este año coincide con un periodo vacacional escolar. Aunque desde la dirección de la compañía ferroviaria se minimiza el alcance de la protesta, los representantes sindicales han advertido que la movilización podría intensificarse a lo largo de la semana.
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