La compañía fluvial inició un viaje que la llevará del segmento medio a la consolidación definitiva en el premium. Para entender ese viraje es preciso recordar que CroisiEurope controla desde la concepción y construcción de los barcos hasta su comercialización. “Eso hace que, si bien estamos yendo hacia un segmento premium, mantengamos una relación calidad-precio imbatible”, señaló Tomás Fernández, director comercial para España y Latinoamérica.
El equipo de CroisiEurope en su stand en la reciente Fitur de Madrid.
Tomás Fernández explicó las novedades de CroisiEurope.
La naviera, que ya tiene una flota de 56 barcos navegando por 36 ríos del mundo, se propuso reducir el número de pasajeros a bordo: “Que no es lo mismo que decir que estamos reduciendo el tamaño de los barcos. Sino que donde antes hubiéramos hecho camarotes para 180 personas ahora haremos para un máximo de 150 a 160 personas. Y, además, empiezan a aparecer en nuestra flota los barcos para 100 clientes. Esto quiere decir que las suites son muchísimo más amplias y modernas”, explicó Fernández.
En este sentido, este año empezará a funcionar un segundo barco de la compañía en África y un nuevo lodge para los cruceros-safaris de cuatro días por Zimbabue, Zambia y Botsuana. Con la salvedad de que el crucero tiene solamente ocho suites, igual número de habitaciones que en el lodge en una isla privada (cada una de 80 m² con jacuzzi). “Ya no es un crucero, es toda una experiencia para nuestros clientes conocer un sitio así en un grupo de 16 personas como máximo”, apuntó Fernández.
Otra de las novedades es que este año operarán Egipto con otro producto premium y a partir de abril-mayo iniciarán el recorrido por Canadá y el río San Lorenzo con un barco de 60 suites comprado a Silversea.
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