La prohibición de emitir factura A sigue generando debate

"No hay novedades en el régimen de facturación que rige para la actividad. Lo que sucedió es que hubo un cambio en el proceder de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), en los operativos de fiscalización", introdujo Rafael Miranda, vicepresidente de la Federación Empresaria Hotelera Gastronómica de la República Argentina (Fehgra), a cargo del departamento de Fiscalidad y Tributación.
Pero para entender la situación actual es necesario hacer un poco de historia. En 1995 se modificó la ley de IVA, prohibiendo el cómputo del crédito fiscal a los consumidores de ciertas actividades, entre las que se encontraba la hotelería y la gastronomía. Pero, hasta esa instancia, la norma no indicaba qué tipo de factura debían emitir los establecimientos del sector, rigiendo las pautas generales de la ley de IVA. O sea, para un consumidor final se entregaba una factura o ticket B; mientras que a un RI se le emitía una de tipo A. "Sin embargo, en 2003 la AFIP dictó la RG 1415, que indicó que el sector debe emitir factura B en todos los casos, sin importar el carácter del cliente (RI, consumidor final, exento o monotributista)", relató Miranda.
Cabe remarcar que esta resolución no tomaba en cuenta los casos en los que consumo -aun cuando se trate de alimentos o bebidas- forma parte de la actividad que realiza el cliente. Denegando la posibilidad de que un RI pueda computar el crédito fiscal que genere dicha operación, al momento de liquidar el IVA.
Sin embargo y según explicó Miranda, "el principal punto del conflicto surge hoy porque la resolución de 2003 tuvo escasa difusión, y ni siquiera fue aplicada por los inspectores de la AFIP. Por lo tanto la costumbre siguió siendo la de emitir factura A cuando un cliente RI lo solicitaba. No obstante, en las últimas inspecciones comenzaron a aplicarse multas a establecimientos del sector que las emitían".
Sobre la postura que tomó la Fehgra al respecto, el vicepresidente aclaró: "Mantuvimos reuniones con funcionarios de la AFIP para que se dicte una norma reglamentaria que ponga fin a la discusión y a la que todos los establecimientos puedan ceñirse. Porque en gastronomía si un establecimiento emite factura A, el cliente lo va a preferir y ahí se produce una competencia desleal. En el caso de los hoteles sucede lo mismo pero se suma el hecho de que, en caso de mediar una agencia de viajes, el huésped recibe por parte de esta última una factura A, que sí le permite computar el crédito fiscal porque es un servicio de turismo".
Frente a los reclamos empresarios y confusión que se genera en el sector sobre este tema, la AFIP está analizando una nueva RG. A partir de la misma exigirá a quienes pidan una factura A que completen una declaración jurada. "Si bien la operatoria será sencilla, no terminará de resolver el problema. La declaración jurada constará de completar con una cruz un formulario, indicando la excepción por la cual se pide una factura A. Sin embargo, que el consumo forme parte de la actividad de ese cliente no figura entre las mismas", adicionó Miranda.